El Comentario

Otra victoria en casa, la quinta consecutiva, con el único lunar desde el comienzo de la Liga del partido ante el Racing, donde nos estamos haciendo fuertes muy a diferencia de los partidos disputados fuera de casa, y poniendo broche final con un, al menos, “buen sabor de boca” a una semana negra que llevábamos con el lamentable partido en Cádiz y con la bochornosa imagen dada en la Copa del Rey en Ávila. Pero otra vez volvimos a dar una imagen mala en la primera parte, nuevamente con un juego “plano”, muy lento y previsible, ante un Burgos también con muchas carencias, pero que incluso fue capaz a adelantarse en el marcador. Menos mal que el empate llegó en el momento justo y luego en la segunda parte si que "dimos" un pasito adelante y tuvimos ocasiones de sobra para, como al final sucedió, hacernos con la victoria.

Pero el equipo sigue teniendo momentos muy plomizos, muy lento y sin desborde, y otros mucho más “eléctrico”, más vertical, mucho más profundo e intenso, con una gran diferencia entre ambos. Es igual que sucede con las “imágenes” que solemos dejar en los partidos del Tartiere y las que luego vemos a domicilio, totalmente diferentes. Y en el “debe” de esta victoria muy importante, el ver que sigue habiendo jugadores que nos consiguen dar un paso adelante cuando se les necesita por lesiones, muchas, o por sanciones y siguen aportando muy poco o incluso nada. Ese es el mayor pero del equipo, que pese a la plaga de lesiones, los de “fuera”, los no titulares habituales, el "llamado" fondo de armario siguen sin postularse para ser de la partida, y en estos momentos con tanta gente afuera hay que aguantar como buenamente se pueda.

Comenzábamos en la vergonzosa hora de las dos de la tarde del Domingo, caluroso y soleado en Noviembre como si fuera casi Junio, con Aarón en la portería, Rahim en la izquierda, Calvo y Luengo de centrales y Lemos en la derecha, en el pivote un infame e inoperante Del Moral junto a Colombatto y Cazorla, en una banda Ylyas y en la otra Hassan y arriba Alemao. Muy pronto llegaron los problemas con la lesión de Lemos y la decisión del “míster” ,en vez de meter el cambio natural que sería Lucas, que entrase Jaime Vázquez y que Luengo “volviera” al lateral. Y en la primera parte lo dicho, futbol muy lento y cansino, y los castellanos buscando robar y crear alguna contra. Así en un error de marcaje llego su primer gol y ver las cosas muy difíciles. Mejoramos algo a partir de ahí, al menos con mas “ganas”, y casi al borde del descanso, menos mal, llegó el empate que nos daba “otra vida”.

En el segundo periodo si que nos fuimos arriba, mejoramos, mas “verticales”, llegamos y fuimos capaces a darle la vuelta al marcador con un muy buen gol de Paraschiv tras pase de Cazorla y ,casi al final, sentenciar con una buena contra llevada por Moyano y bien definida por Chaira. Buena victoria, pero partido mucho más difícil de lo que, quizás, refleja el marcador.

Y tras demostrar que en casa seguimos siendo solventes, nuevamente llega nuestro “talón” de Aquiles que es el irnos fuera de casa. Y esta semana toca rendir visita a Albacete para enfrentarnos a un equipo capaz de lo mejor y de lo peor y que viene de hacérselas pasar mal al líder Racing y una semana antes de remontar ante el Sporting. Esperemos, pese a las “infinitas” bajas con las que llegaremos poder, de una vez por todas, dar una imagen diferente a domicilio.