TAN
SOLO ES MI OPINIÓN
Pues como decía en mi crónica:
Se acabo la magia del Tartiere. Y como también
decía, lo hizo ante posiblemente, de los equipos que ya nos han visitado, el
que menos busco la victoria. Pero con un tiro entre los tres palos, les fue suficiente
para derrotarnos y dejarnos con “cara de tontos”. Y lo que también parece
claro, que Roberto Aguirre, técnico asturiano del Zamora, nos tiene
absolutamente tomada la medida, porque en los tres últimos partidos, los dos de
la temporada pasada mas este, no hemos sido capaces a marcarles ni un solo gol.
Y eso teniendo en cuenta, que el de Oviedo del año pasado, el Zamora lo concluyó
con 8 jugadores. Pero ni por esas. Y el de ayer, fue uno de esos partidos, que
tienes la sensación de que aunque juegues seis días seguidos, no eres capaz de
meter un gol.
Y es que la primera parte fue
horrorosa, con un Real Oviedo que no tenia ni su velocidad habitual, ni
desborde, yéndonos siempre hacia el centro, donde ellos lo tenían fácil para
defender, y no éramos capaces a llegar
con peligro alguno. Y aunque ellos tampoco ofrecían nada, en una diagonal muy
mal hecha por Sergio Garcia, nos robaron el balón y en una contra nos marcaron
el gol en su única llegada. Tocaba
remar, y ante estos equipos muy bien plantados, nos cuesta horrores. El segundo
tiempo, pues fue un absoluto monologo del Real Oviedo, con entrada de Borja
Valle y D. Cervero, intentándolo por
todos los lados, con varias ocasiones de Linares, de Cervero, pero nada. No era
el dia, y fuimos un quiero y no puedo, costándonos
la primera derrota en casa. Injusta, pero derrota al fin y al cabo. Y lo mas
duro, es que con esta ya son cuatro las derrotas que contabilizamos, y para ser
primero hay que ser mucho mas regular y no tener tantos tropiezos.
Comienza una semana que podía
ser fantástica con un jarro de agua fría. Hay que recuperarse para el jueves en
Copa ante la Real Sociedad, y lo que es mas importante,
ahora, con la derrota de casa, se hace casi imprescindible el ganar en
Torrelavega el Domingo al Tropezón, porque dos caídas seguidas, si que empezarían a oscurecer el panorama. A ver si somos capaces
a tener un regularidad, que es lo que falta. Ojala.
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