
Pues al final, una victoria imprescindible, justa
porque fuimos mejores, no cabe ninguna duda, y finalmente con un resultado
mucho más holgado del que imaginábamos viendo
la primer parte, e incluso, el inicio de la segunda. Y es que, pese a que el
dominio del “balón”, el control del juego, sobre todo en el primer tiempo fue nuestro,
el equipo sigue mostrando muchísimas carencias, muchas limitaciones, para
llegar al área rival con peligro y crear ocasiones. Seguimos desempeñándonos con
mucha lentitud, con un futbol muy previsible, con mucho balón al pie sin arriesgar absolutamente nada, sin romper las
líneas de los rivales, siendo muy poco “verticales”, con pocas llegadas por banda,
abusando del “pase” horizontal, y así, cualquier equipo mínimamente organizado,
aunque muy limitado como por ejemplo es este Racing de Ferrol ya casi desahuciado,
pues le vale para desconectarnos totalmente.
Quizas, a fe de ser sinceros y tratándonos de quedar
con algo positivo, desde el cambio en el banquillo, si que se ve al equipo con
algo más de garra, con la presión mas alta, mas arriba, mas “coordinada” y
tratando de robar más arriba el balón, pero luego en la faceta ofensiva, nos
sigue costando un mundo darle “velocidad” al juego. Y también, valorar que hay
jugadores desparecidos durante gran parte de la temporada, que parecen “conectarse”
en estas últimas jornadas, pero por el contrario, la plaga de lesiones, y muchas
de ellas musculares, parece que no tiene fin.
Comenzábamos en la noche del sábado, tras toda una
jornada llena de “festejos” para celebrar nuestro 99 cumpleaños, incluido el “Dia
de las Peñas”, con Aarón en portería, otra vez Lucas en la banda izquierda que,
por desgracia, fue otro nuevo lesionado muscular; en el centro de la defensa
Luengo que está despachando unos grandes partidos junto a Calvo y en la derecha
Nacho Vidal; en el centro del campo Paunovic, creo que erróneamente, decidió “cargar”
más el medio centro que las bandas, con Sibo, Colombatto, Santi Cazorla y Seoane
tirado un poco a banda, en la otra la entrada de Moyano tras la enésima recaida
de Paulino y arriba Alemao. Y la verdad es que, en la primera parte, el
monologo de posesión del balón azul fue prácticamente absoluto, pero mas bien
en zonas “templadas”, sin llegar arriba con excesivo peligro. Y aun asi, hubo
varias muy claras de Cazorla, Calvo y una clarísima de Alemao, de esas que “el”
suele fallar. De los gallegos, muy poco, solo bien colocados y sin apenas presencia
arriba.
Y en la segunda, el Racing que se estiró un poco,
pasamos algún mínimo susto, nos seguía costando un mundo llegar arriba, pero llegó
el gol de la tranquilidad de Colombatto. Seguimos igual, y ya en la recta final
del partido, con los cambios que nos dieron frescura y el cansancio de los
ferrolanos, fuimos capaces a sentenciar el partido. Lo dicho, más goles que
futbol.
Y ahora ya si que viene el sprint final y definitivo de la Liga. Seguimos “ahí colocados”, pero aún queda mucho que sufrir para, al menos, atar una posición de play off. Y toca rendir visita esta fin de semana a tierras cordobesas, para enfrentarnos a un equipo con una de las plantillas mas limitadas de la categoría, pero que de la mano de Iván Ania está haciendo una temporada fantástica. Ya nos “mojaron”, y de qué manera, la oreja en casa, así que habrá que atarse bien los machos para tratar de lograr puntos.
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