Después de tanto pasado, de los últimos varapalos
incluido el repaso de Coruña, al menos una semana, aderezado con este pasado
fin de semana de alegría. Y es que el menos el equipo, todos, alentados por una
afición ESPECTACULAR, ya desde el hotel, pasando por el recorrido, la llegada,
el campo, antes, durante, después,………pues se dio cuanta de lo que se jugaba, de
que no era un partido más, y que la afición, haciendo de tripas corazón, había dejado
a un lado los sinsabores para ponerse del lado del equipo a tope. Y lo que no
se les puede negar es concentración, el salir “con el cuchillo entre los dientes”,
a comerse al rival, ganando todos los duelos, todas las disputas, ……en fin,
dejando claro que esto era wel TARTIERE y que aquí, nuestro rival, sacar nada.
Que aquí, el Real Oviedo y su afición, iban ser los vencedores. Y ese primer cuarto
de hora, fue con mucho lo mejor del partido, y lo que nos dio para ganar los
tres puntos. Pero, como en mi crónica reflejo, otra vez, nuevamente, dejamos un
partido, a pesar de los dos goles, abierto, y a punto estuvo de costarnos un
disgusto.
Porque pese a una ligera mejoría, muy escasa la verdad, y pese a que
el rival era flojo de verdad, seguimos siendo muy blanditos defensivamente
hablando. Y asi, un penalti cuando menos dudosos, ponía el interés y los
nervios en la grada. Menos mal que el final fue el deseado, y esperemos que
esto, esta victoria ante el “eterno” , sea un punto de inflexión para el
equipo.
Y asi, en la noche de Sábado, ante una afición
ENTREGADA, no ya desde el comienzo, sino desde casi la mañana, salíamos con el
regreso de Javi Hdez. como central ( injusto
había sido que se quedase fuera la semana pasada, muy injusto) acompañando
a un más entonado Alanís junto a Forlin, con Mossa en el lateral y en la otra
banda , otra vez el “experimento” Bárcenas, con un imperial Tejera junto a Folch en el pivote, Saul, Ibra y Joselu
arriba. Y , bastante parecido al partido del Mallorca, pero con mucha más
intensidad, lucha y brega, salimos al comienzo, ganando siempre las disputas
con mucha fe y corazón. Y asi al minuto cinco, tras porfiar por varios balones
de cabeza, un balón suelto en el centro del área e Ibra que un fenomenal
escorzo nos ponía por delante. Delirio en las gradas, pero seguíamos. Y así,
poco después, en lo que habitualmente los rivales nos solían hacer, primer balón
parado, maravillosamente puesto por Saúl y Alanís que conseguía el segundo.
Bien el equipo, ante un rival que ni existía. De ahí al descanso, dominio absoluto,
que, quizás,deberíamos de haber aprovechado para “machacar”.
Y en la segunda parte, tampoco mucho mas. Entrada de
Diegui en la banda por Saúl que se
resintió, pero un Sporting sin apenas llegada. Pero a un cuarto de hora para el
final, la “patochada” habitual y un penalti en contra, que servía para acortar distancias. Menos mal que fuimos
listos, paramos bastante el partido, con los cambios de Toche y de Carlos Martínez,
incluso una ocasión clarísima de Diegui, y de ahí al final poco mas, y tres
puntos muy importantes. Delirio en las gradas, porque YA NOS MERECIAMOS una alegría.
Pero lo dicho, poca mejoría futbolística, un equipo
que sigue bastante plano, pero que al menos puso en el terreno de juego lo que
hay que poner. Y ahora, si de verdad queremos que esto sea un punto de inflexión
y no solo flor de un día, toca refrendarlo, otra vez en el Tartiere, ante el
Reus de Linares. Ese si que seria un primer “escalón” para buscar cotas algo más
altas. Y por cierto, Aarón que se ha desligado del club. Creo que es lo mejor,
porque la cabeza de este chico, ya no estaba aquí. Y para tener rellenos, mejor
que dejen sitio a los que de verdad estén implicados. No obstante, que tengas
suerte.
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