TAN SOLO ES MI OPINIÓN
Por fin retornó la victoria en el Carlos Tartiere.
Lejano quedaba ya aquel día en el que habíamos sido capaces a ganar al Almería,
y ayer, otra vez en una soleada mañana de Domingo, como en Cádiz, fuimos capaces
a romper el maleficio y darnos una alegría a todos los fieles que en un buen numero
nos congregamos en la Eria. Y la verdad, es que al menos se vio una garra, un
querer, un ímpetu, una gana, que al menos hizo que los errores, que seguimos
teniendo y muchos, y el pobre juego, que seguimos realizando, al menos ayer
quedase un poco oculto y diluido y que pudiéramos
conseguir los importantísimos tres puntos.
Y si, como digo en mi crónica, y como se está viendo
jornada tras jornada en cada uno de los partidos de esta segunda división, los
resultados y los puntos, se deciden por pequeñísimos
detalles, habiendo una igualdad total entre la mayoría de los equipos. Y ayer,
pues esos pequeños detalles, como no ocurrió el día del Numancia, pues “cayeron”
de nuestro lado y se pudo ganar. Pero como también reitero, y aunque en diversa
prensa y radios se diga lo contrario, a mi el futbol que practicamos me sigue
pareciendo escaso, plomizo, escasamente vertical , carente de velocidad y
desborde.Yo sigo viendo un equipo "ramplón", aunque bien es verdad, que como la mayoria de los equipos de esta categoria. Pero a mi el resto, poco me importan. A mi quien me importa es el Real Oviedo, y lo que veo, lo digo, aunque otros opinen de otra manera. Al menos, como reitero, la actitud se ha visto, y por eso la grada ha
estado con el equipo.
Ayer, comenzábamos con una defensa con Fernández en
el lateral derecho, Cristian que se afianza en el izquierdo, y con la pareja de
centrales que, hoy por hoy, mejor resultado están dando David-Verdés. Y así hay
que reconocerlo, que Gil hasta el momento, está defraudando. Blandito,
blandito. En el centro, la vuelta de Erice con Torró, Linares echado a una
banda, en la otra Rocha, aunque haciendo más labor en zona central ayudando a
los pivotes, Michu en la media punta y Toché arriba. Y la posición de Michu,
fue una de las claves, porque ahí el se siente cómodo, tiene llegada y visión
de juego.
Y comenzamos bien, con alguna llegada, como siempre
tocando mucho pero en zonas “baladíes”, un par de sustos del Rayo en balones
parados (nos rematan TODOS, cada balón parado en contra es un sufrimiento), y apareció
Michu para dar un pase medido entre los centrales a Linares para que este,
porfiando y echándole garra, llegase para ponernos por delante.
En la segunda parte, un poco más que apretaron los madrileños
aunque con escasas ocasiones, un gol anulado a ellos por fuera de juego, una clarísima de
Linares y al final ese penalti cometido sobre Michu que Toché convertía para darnos
unos minutos finales de tranquilidad.
Lo dicho: tres importantes puntos y una alegría para
la fiel y sufrida afición azul. Esperemos que nos sea un espejismo, y que como decía
el otro día, no hagamos como los cangrejos y demos un “paso para delante y dos
para atrás”. Esperemos poder ratificar esta mejoría en Girona y volver a ser un
conjunto correoso y difícil de ganar. Queda mucho que mejorar, pero también creo,
que el margen de mejora es bastante, pero teniendo claro a qué y cómo queremos
jugar, y los mimbres con los que contamos para plasmarlo sobre el cesped.
Porque a día de hoy, eso aun no esta claro.
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